La Tigra

El Parque Nacional La Tigra (PNLT) es un área de conservación de ecosistemas montañosos que juega un papel crucial en el suministro de agua, proporcionando alrededor del 30% de las necesidades hídricas de Tegucigalpa y cubriendo el 100% de las comunidades aledañas. Este parque es hogar de una rica biodiversidad, con más de 200 especies de aves y varios mamíferos, como pumas y tigrillos, dentro de una extensión de 24,040 hectáreas de bosque nublado. Desde su protección oficial en 1980, el PNLT se ha consolidado como un referente en la conservación ecológica del departamento de Francisco Morazán, conservando importantes recursos naturales.​

Fue declarado oficialmente como parque nacional el 1 de enero de 1980 mediante el Decreto No. 976-80, convirtiéndose en el primer parque nacional de Honduras. Sin embargo, la historia de protección del área data de mucho antes, cuando en la década de 1920 se reconoció su valor hídrico, ya que abastecía a Tegucigalpa y las comunidades cercanas. Antes de ser protegido, la zona fue severamente afectada por actividades de explotación forestal vinculadas a la mina El Rosario, una importante operación minera a principios del siglo XX, que aceleró la deforestación del área. Esto llevó al gobierno a tomar medidas para salvaguardar la zona y asegurar el mantenimiento de los recursos naturales, particularmente su bosque nublado y su capacidad de almacenamiento hídrico. En 1952, se hicieron las primeras iniciativas para preservar la zona como reserva natural. A partir de 1980, bajo la gestión de Amitigra (Amigos de La Tigra), el parque se ha consolidado como un área protegida, con regulaciones que restringen actividades humanas dentro de la Zona Núcleo (ZN) y limitan las actividades en la Zona de Amortiguamiento (ZA), asegurando la conservación de su biodiversidad.